Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad
Desde aquí vamos a intentar acercarte aún más a está patología y nos ponemos a tu disposición para poder ayudarte a comprender cómo perciben los niños que padecen TDAH su relación con el entorno, el aprendizaje, su grupo de iguales….en definitiva como es, su día a día.
Tipologías
Combinada
En la presentación combinada, el niño debe haber manifestado el criterio de Inatención y el de Hiperactividad-Impulsividad durante los últimos 6 meses. Dentro de este tipo de déficit atencional se encuentran niños con una actividad motora excesiva, tienen dificultades para permanecer sentados durante las actividades del aula y además su foco atencional se ve afectado por estímulos tanto externos como internos repercutiendo en la ejecución de las tareas.
Falta de Atención
En cuanto a la presentación donde predomina la falta de atención, durante los últimos 6 meses el niño presenta el criterio de inatención pero no cumple el de hiperactividad-impulsividad. Esto entre otros factores nos hace diferenciarla de la modalidad anterior, normalmente son alumnos que pasan desapercibidos en el aula y en las reuniones con los padres su conducta recibe calificativos como “últimamente está como ausente”, “aparentemente está atento a la pizarra pero no parece que no comprende las cosas…”
Su variabilidad atencional es alta, ya que se dispersan con mucha facilidad de las actividades propuestas y no necesariamente porque tenga estímulos externos en el ambiente.
Hiperactiva-Impulsiva
En referencia a la presentación Hiperactiva-Impulsiva, el niño presenta una actividad motora excesiva cumpliendo el criterio de Hiperactividad-impulsividad durante los últimos 6 meses, pero su foco atencional le permite continuar ejecutando las tareas.
Al niño quedarse quieto le supone un esfuerzo enorme, tienen dificultades para controlar sus impulsos, muestran un bajo control inhibitorio y esto a veces les puede traer alguna consecuencia negativa, puesto que por mucho que les indiquemos ciertas conductas no logran interiorizar y racionalizar su comportamiento. Es posible que te suenen frases como “¿otra vez te has dado un golpe con la misma puerta?, tienes que mirar por donde vas…” o “¿puedes terminar de cenar tranquilo y luego juegas?”
Si consideras que tu hijo se encuentra en alguna de estas situaciones, estamos a tu disposición para asesorarte y ofrecerte la ayuda profesional que necesitas.
Es importante conocer que además el TDAH presenta comorbilidad con otras patologías como:
Trastornos del Estado de Ánimo
Trastornos de la Conducta Disruptiva
Trastornos del Aprendizaje
Trastornos del Neurodesarrollo
CUESTIONARIO
Te planteamos un pequeño cuestionario para poder acercarnos un poquito más a tu percepción sobre la situación del niño/a valorando diversas situaciones de acuerdo a la frecuencia con las que éstas aparecen:
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